Abogados buscan innovar en la prestación de servicios jurídicos en Venezuela

El mundo está en un constante proceso de evolución, y cada uno de los productos y servicios que ofrecen los profesionales presenta cambios de manera periódica. Sin embargo, en algunos mercados puede verse que la mentalidad de sus principales actores obliga a que sean más estáticos que el resto. Un caso de estos es el de las firmas de abogados.

Es por eso que en Venezuela, un grupo de abogados decidió darle un giro a la prestación de servicios jurídicos a través de una serie de innovaciones con las que plantean satisfacer las necesidades de sus clientes sin importar dónde se ubiquen. Se trata de la firma OMC, fundada por Julio Ortega, Keila Madero y Alexis Cova.

¿Cómo están innovando en el sector?

Para entender cómo es que están tratando de revolucionar la forma en la que se prestan este tipo de servicios, Periódico El Emprendedor entrevistó a Julio Ortega, cofundador de la firma, y el encargado de darle origen al proyecto de asistencia jurídica en red (ASIJURED), una iniciativa única en su estilo.

Ya en el pasado se entrevistó a Ortega, quien explicaba cómo fue su paso de 10 años por el Ministerio Público y los motivos que lo llevaron a cambiar de ambiente. Él afirma que lo hizo con la intención de crear una nueva etapa en su carrera profesional, dando los primeros pasos hacia el desarrollo de cursos y charlas, y más adelante creando su propia firma de abogados.

Al conversar sobre este nuevo proyecto, Ortega explica que esta red de asistencia nace con la idea de facilitar la prestación de servicios jurídicos dentro del territorio nacional, abaratando costos y disminuyendo el tiempo entre un suceso y la posibilidad de brindar una respuesta, cuando prestador y cliente se encuentran en zonas geográficas apartadas.

Afirma que durante un momento de ocio, buscó si alguna firma en el país ofrecía algún servicio que pudiera lograr estos objetivos. Para su sorpresa, a pesar de la cantidad y el tamaño de firmas con las que se topó en su investigación, ninguna ofrecía una solución para la problemática previamente planteada, y es entonces que comienza a bosquejar el proyecto.

¿Cómo funciona la red?

Para poder lograr que los servicios puedan prestarse en cualquier parte del país ante cualquier necesidad jurídica, y de forma veloz, la red se encarga de buscar y expandirse progresivamente con abogados en todo el territorio nacional. La firma busca a profesionales que, por diferentes motivos, quieran incrementar sus ingresos a través de la prestación de servicios jurídicos.

Todo empieza con una breve entrevista en la que este abogado solo debe hablar de su experiencia para que la red pueda ofrecerle el acompañamiento y respaldo necesario para su crecimiento profesional. Ortega explica que se trata de un modelo atractivo, ya que sin importar dónde se esté, en el círculo social de casi cualquier persona hay alguien con una necesidad jurídica, ya sea divorcio, matrimonio, contrato de negocios, etc.

"No importa donde estés, si eres de la red y puedes satisfacer una necesidad", afirma Ortega, quien asegura que este brinda oportunidades a los demás abogados de la red y no solo al que atrae al cliente, ya que si alguien capta a una persona este está en otro estado, es un profesional cercano el que se encarga de prestar el servicio inicial, para luego trabajar en equipo quien lo sugirió.

Actualmente, se puede formar parte de esta red de manera gratuita, simplemente otorgando una comisión del 30% del pago por servicio a la firma de abogados. Sin embargo, se está analizando comenzar a cobrar una membresía al momento de admitir a un nuevo profesional dentro de la red de asistencia.

¿A quién satisface la red?

Lo que más se maneja por la inmediatez que se requiere, para la resolución de ciertas situaciones, son los denominados procedimientos en flagrancia, es decir, un abogado de un estado tiene un cliente habitual que se moviliza por el país, este cliente tiene un problema en un estado lejano a la ubicación de su abogado y no puede prestar el servicio de forma ágil.

Estas situaciones requieren de una respuesta rápida, pero por motivos geográficos no pueden ser resueltos por el abogado. Gracias a la red, en menos de 20 minutos el cliente puede tener un abogado que lo asista allá donde se encuentre. Los accidentes de tránsito, las citaciones por entes de seguridad, denuncias familiares por violencia o similares, son algunos de los casos que requieren mayor inmediatez. Todas estas situaciones son comunes que entran en el ámbito penal, que representan cerca del 70% de todos los servicios prestados.

Es importante recordar que cuando se habla del área penal, no solo se refiere a homicidios, robo, secuestros,  violaciones, entre otros, sino también a todo lo que se atiende en esta rama del derecho. Afirma entonces que no todo tiene que ser reactivo, sino que el mercado de los servicios jurídicos también debe contemplar la prevención.

De esta manera podemos ver como la firma OMC estaría planteando una forma de revolucionar la prestación de servicios jurídicos en Venezuela, demostrando a su vez que no existe mercado en la actualidad que no pueda prestar un mejor servicio a su clientela.